Día 1 – San Sebastián de los Reyes a Cercedilla. 64km

Salimos de casa, con la emoción de la salida, con el amanecer, con la incertidumbre de lo que nos esperaba. Según la guía de Camino de Santiago de Juanjo Alonso, proponía llegar el primer día hasta Mataelpino, decidimos empezar por el carril bici hasta Colmenar Viejo ya que la ruta del Camino es nuestra ruta normal de entrenamiento, así que si avanzábamos esa parte y teníamos la oportunidad de ir más lejos en el día, serían kilómetros ganados para el día siguiente.

Así que avanzamos, con nuestra concha que indica que estamos haciendo el Camino de Santiago, junto al amanecer que nos acompañaba y ese susto que me invadía de cuestionarme si realmente lo lograría, sobre todo el levantarse el segundo día después de más de 60km, y luego un tercero y así. En eso, un ciclista nos alcanza y dice en alto «Buen Camino», difícil explicarles la reacción que eso tuvo en mí, fue como una inyección de energía directo en la sangre y en las piernas, y una euforia que lo que quedaba era «Sí, sí se puede». Y así de repente estamos en Colmenar Viejo, luego de una parte técnica y complicada en Manzanares y casi sin darnos cuenta ya estábamos en Mataelpino, muy temprano y con mucha energía todavía como para quedarnos ahí, y después de todo, si aprovechábamos ese impulso nos quitaríamos la mayoría de la subida del día siguiente.

El calor en ese momento estaba realmente fuerte y venía la subida de Navacerrada, nos detuvimos a comer e hidratarnos y luego seguimos. Primero de los «repechos» fuertes, de esos que no se olvidan. Poco a poco aprendí a tenerle a esa palabra: repecho, cada vez que la guía mencionaba que había alguno importante.

La subida de Navacerrada la hicimos a un lado de la carretera, habían trayectos que por el camino había que cargar la bici, así que decidimos subir por un lado, un trayecto lleno de zarzas que se lograban meter hasta en el zapato y finalmente pinchando una de las ruedas de mi bici. Menos mal que íbamos bien preparados y le pusimos la espuma repara pinchazo y a seguir.

Luego bajar un poco hasta Cercedilla y una vez ahí buscar alojamiento en un Albergue Juvenil. Tuvimos mucha suerte, un sitio paradisíaco y lo teníamos para nosotros solos. A las 8:30, después de un buen baño, la cena que la tenían lista, una cena de campeones, espectacular. Quise escribir mis experiencias del día, pero no lograba mantenerme despierta, así que me rendí y a dormir, con la expectativa de cómo amaneceremos mañana.

Día 2 Cercedilla – Navas de la Asunción. 86km

 

Primer sello en Colmenar Viejo
Mis Jaras!
Banquete en el albergue!