Adoptando

Cada uno de nosotros se encuentra de distintas maneras algún gato que decide adoptar. Están los que te regalan, los que ven en una jaula en una tienda de mascotas, los que nacieron en el sótano o estacionamiento de la casa o trabajo, los que estaban en jornadas de adopción, los que rescataron y tantas historias posibles como gatos hay.

Lo importante es poder conseguirle a estos gatos un hogar y así evitar el abandono.

En el momento de adoptar una nueva mascota, pensamos que nosotros los elegimos a ellos, cuando en realidad, pareciera más bien que ellos nos eligen a nosotros.

¿Cuántas veces te han  ofrecido un gato o un perro en adopción, y has dicho que no, hasta que llega uno que tiene un «yo no se qué» que termina convenciéndote? Es a eso lo que me refiero, y cuando eso te pase, no lo rechaces, no lo luches, porque probablemente es exactamente lo que necesitas.

PRIMERO Y MAS IMPORTANTE: La mejor manera de evitar el abandono es evitando que se reproduzcan sin control.

ESTERILIZA TU GATO

Es muy hermoso tener la oportunidad de ver una madre gato con sus cachorros, y uno quisiera poder ver ese milagro de la vida. Pero lamentablemente, cada gato que nace puede tener en cada celo entre 3 y 5 gatos de promedio. ¿Recuerdan la historia de Shadow y Caterpillar? Fueron 5 gatos, a los cuales sólo pude quedarme con 2. Ahora imaginen que cada uno de ellos tuviera a su vez otros 5, y esos a su vez otros 5. Es muy difícil conseguirle casa a todos, siendo que todos merecen tener un hogar donde puedan ser amados.

Así que por favor. Si quieres tener otro gato cachorro, adopta uno del refugio más cercano, y esteriliza a tu gata/o. Hay jornadas de adopción, vacunación y esterilización constantemente. Aprovecha estos recursos.

VENTAJAS DE LA ESTERILIZACION

  • Evitas el abandono de muchos de ellos
  • Evitas enfermedades relacionadas como cáncer de útero, entre otros
  • Evitas que tu gato esté en riesgo al escaparse y buscar «amor» en la calle.

Uno no sabe de qué manera te llega tu/s gato/s. Shadow y Caterpillar nacieron en el depósito donde trabajaba como ya comenté en otro momento, Nikita nos conquistó desde la jaula con su particular «voz» y boquita super cuchi, y luego una magistral venta de su rescatista diciendome «cuídala por 1 mes», sabiendo que nos enamoraríamos de ella y no querríamos devolverla. De hecho, cuando nos la llevamos a la casa le pusimos el nombre «Mientras Tanto»… al tercer día fue re-nombrada Nikita por sus habilidades ninjisticas y de la CIA/FBI o algo de eso.

Luego Candy… siempre dije: Dos gatos son más que suficientes. Pero no me esperaba encontrar con la astucia de esta particular y espectacular gata. La ví en una jaula en una tienda de mascotas (como es mi costumbre asomarme a cuanta jaula con gaticos veo) y entre como 8 gatos, estaba ella, arrimada a una esquina de la jaula, lo más lejos que podía de la gente, a diferencia de los otros gaticos super sociables, cuchis y juguetones. Tenía un ojito medio cerrado (infectado) y me llamó la atención por eso. Le pregunté a la muchacha de la tienda si le estaban poniendo algo en el ojo y me dijo que había tratado pero que es muy feral y que la mordía y rajuñaba cada vez que quería ponerle las gotas.

Le pregunté que si quería que la ayudara a sostener a la gata, después de todo había aprendido a manejar los gatos y no me daba miedo que tratara de morderme o rajuñarme. Ella tendría unos 3 meses de edad en ese momento. Le sorprendió mi oferta, pero accedió, así que metí la mano en la jaula, la agarré por el pellejo del cuello (como las madres agarran a sus cachorros) y la agarré con firmeza sosteniéndole también las patas.

En efecto, bastante feral resultó ser la gatica, pero como la tenía bien agarrada, le pudieron poner las gotas sin que ni ella ni nosotras resultáramos heridas. Volví al día siguiente para asegurarme que le pusieran el medicamento de nuevo.

Candy before adoption
Candy el primer día que la ví

Candy tiene la misma pinta atigrada que tenía Caterpillar. Eso inmediatamente me levantaba un alerta porque me había dicho a mi misma que JAMAS! iba a adoptar otro gato atigrado, que Caterpillaer era único e irremplazable (lo sigue siendo, al igual que Candy, y Shadow, y Nikita, y Minina, mi viejita rescatada por mi esposo hace 14 años que vive con mis suegros), así que me negaba adoptarla. Sólo procuré decirle a la muchacha que tratara de jugar con ella y de tocarla mucho para que se acostumbrara a la gente para volverla más sociable porque si no, nadie la iba a querer adoptar por antipática.

Candy Shadow & Nikita2
Candy, Shadow & Nikita
2014-07-21
Minina

Bueno, no estaba equivocada… pasaba de vez en cuando por la tienda, todos los otros gatos los adoptaban, menos a ella. Pasó más de 1 mes, y cuando volví, la gata seguía ahí, igual de antipática. Así que pensé, que el depósito no tenía gato desde que me llevé a Shadow, así que era la solución perfecta (creía yo).

Agarré a la gatica, y me la llevé al depósito. La dejé encerrada en la oficina para que se fuera acostumbrando a la gente. Una de las primeras cosas más impresionantes, es que cuando tuvo suficiente confianza conmigo, como estuvo tanto tiempo encerrada en una jaula, con piso de reja, toda textura le parecía estupenda, y parecía «marchar» en el escritorio, piso, etc como masajeando la superficie.

Sorprendentemente, para lo antipática que era, sólo tomó un par de días que fuera más sociable y se dejara agarrar con facilidad. Sólo necesitaba un poco de cariño y comprensión. Me seguía y cantaba por todos lados.

Resultó ser bastante pila y sociable Candy, logró escaparse por el techo para estar del lado del guardia y no estar sola. Y en eso se jugó su carta maestra de tener problemas estomacales, y por recomendación del veterinario me la llevé a mi casa, por si acaso era el estrés de estar sola noches y fines de semana que le causaba eso. Como explico en la parte de alimentación de los gatos, no fue sino 4 meses después que ella mejoró gracias a la comida casera, y después de estar tanto tiempo en mi casa, haber invertido tanto esfuerzo en ella, pues por supuesto que en mi casa se queda!

Su antipaticura fue disminuyendo a medida que su confianza iba aumentando. Incluso hasta hace poco, si uno la cargaba nos mordía pellizcandonos para que la soltáramos, pero con puro reforzamiento positivo ha ido disminuyendo cada vez más. Aunque su personalidad sigue siendo que es ella la que determina cuándo quiere acurrucarse encima de uno, es una gata super cariñosa, y quien la conoció en la jaula jamás podría creer que un gato tan antipático pueda ser tan tierno y cariñoso.

Así que ánimo, persevera en el cariño y ten paciencia. Los gatos saben perfectamente cómo retrubuir el amor, pero uno tiene que ser constante en demostrarles cuánto los queremos. También recuerda, cada uno lo demuestra de manera diferente, según su propia personalidad. Mientras más rápido conozcamos a nuestra mascota, más fácil podremos relacionarnos con ellos y más felices serán ellos y nosotros.

ANIMATE A ADOPTAR! y si ya tienes uno… ADOPTA OTRO MAS!

Nikita (27)
Nikita el día que la adoptamos